La tendinitis es la inflamación o la irritación de un tendón, las cuerdas fibrosas que unen el músculo al hueso. Este trastorno causa dolor y sensibilidad justo afuera de la articulación.
SÍNTOMAS
Los signos y síntomas de la tendinitis suelen ocurrir en el punto en donde el tendón se adhiere a un hueso y, generalmente, comprenden lo siguiente:
- Dolor cuando se mueve la extremidad o la articulación afectada
- Sensibilidad
- Hinchazón leve

FACTORES DE RIESGO
- Edad: A medida que las personas envejecen, sus tendones se vuelven menos flexibles, lo que los hace más vulnerables a las lesiones.
- Profesión: La tendinitis es más frecuente en personas cuyos empleos implican movimientos repetitivos, posiciones incómodas, vibraciones, gran esfuerzo físico.
- Deportes: Es más probable que padezcas tendinitis si participas en determinados deportes que implican movimientos repetitivos, especialmente si tu técnica no es óptima.
COMPLICACIONES
Sin el tratamiento correcto, la tendinitis puede incrementar el riesgo de sufrir rotura del tendón, una afección mucho más grave que tal vez requiera cirugía.
En caso de que la irritación del tendón persista durante varias semanas o meses, se puede manifestar una enfermedad conocida como «tendinosis». Esta enfermedad consiste en cambios degenerativos en el tendón, junto con un crecimiento anormal de nuevos vasos sanguíneos.

PREVENCIÓN
Para reducir el riesgo de padecer tendinitis, sigue estas sugerencias:
- Relájate: Evita actividades que provoquen un esfuerzo
- Estira: Después del ejercicio, tómate tu tiempo para estirar, y así poder maximizar la amplitud de movimiento de tus articulaciones.
- Usa una correcta ergonomía en el lugar de trabajo: Si es posible, haz una evaluación ergonómica de tu lugar de trabajo y ajusta tu silla, teclado y escritorio.
- Prepara tus músculos para practicar deportes.
