CONSEJOS PARA UNA PERSONA CON ARTRITIS REUMATOIDE
Es importante que las personas con artritis reumatoide se mantengan en las mejores condiciones de salud posible. La siguiente información puede ayudarle en aspectos que contribuirán a mejorar su calidad de vida.
Reposo
Pocas veces el cansancio es el síntoma predominante, pero en el manejo del paciente ya diagnosticado se recomienda un reposo de al menos 30 min entre actividades para recuperar las articulaciones de los esfuerzos a que puedan ser sometidas.
Ejercicio
La actividad física es una parte importante de su tratamiento. El ejercicio mejora la rigidez y la limitación de los movimientos causados por la artritis. También puede mejorar la flexibilidad,
fortalecer los músculos. Es por tanto fundamental hacer ejercicio, incluso desde el inicio de la enfermedad, con el fin de mantener
la movilidad completa de las articulaciones, pero no solo evitar las que requieran contacto físico sino también aquellas que involucren impacto o golpeteo articular.
Estados de ánimo
La afectación psicológica puede favorecer que las personas con artritis fumen y beban más, con las repercusiones negativas que esto tiene para su salud y el curso de su enfermedad. En algunos pacientes puede ser necesario un apoyo psicológico o psiquiátrico para mejorar el estado de ánimo y la desmotivación
ocasionados por la enfermedad. Incluso un mal manejo de estrés o depresión en el paciente con artritis reumatoide se relaciona con poca respuesta al tratamiento o incluso complicar el mismo cuadro.
Alimentación
Como norma general debe seguirse una dieta variada que consiste en comer de todo en cantidades moderadas. Una alimentación variada y equilibrada aporta la gran mayoría de
las vitaminas y minerales que el organismo necesita.
Entorno familiar y laboral
Sus amigos y familiares pueden ayudarle con apoyo emocional, comprendiendo y aceptando sus limitaciones y prestándole ayuda física. Es importante tener a alguien con quien hablar
sobre los problemas que ocasiona la enfermedad y que le anime a vencerlos.
Controles clínicos
Los análisis que solicitan deben ser acordes con el criterio del médico tratante, es decir dirigidos por la parte clínica. Las personas con artritis reumatoide y, sobre todo, los que tienen una enfermedad mal controlada y con importante inflamación, tienen más riesgo de que se dañen sus vasos sanguíneos y una mayor predisposición a presentar complicaciones cardiovasculares (infartos cardiacos o cerebrales).
En la actualidad, ha disminuido mucho la necesidad de realización de intervenciones quirúrgicas en pacientes con artritis reumatoide dado que los fármacos disponibles son mucho más eficaces y evitan, en gran medida, la deformidad que produce la inflamación persistente y las recomendaciones antes mencionados.